A Carmen Badel. Podrás ignorar las cosas que te escribo pero no aquello que sientes al leerme. Porque más allá de tu intención de olvido, está tu alma que no ha dejado de quererme.
Domingo 12-02/2017 A Yennifer Realpe. Hay una palabra en mi mente fastidiosa, vergonzosa, impertinente... Olvido. Hay una palabra en mis piernas ardida, hiriente, sanguinaria... Huida. Hay una palabra en mis manos cobarde, ansiosa, indecisa e involuntaria... Ganas. Y hay una palabra en mis labios constante, atrevida, persistente, magnífica... Tu nombre.
Agosto 2024 A Carmen Badel. Me dejaron un amor tirado en la puerta por si lo quería adoptar, debo sacarlo en las noches a pasear para que no se vaya a enfermar. Es tan grande y poderoso que aún para mí es difícil de controlar, es jodidamente triste ver lo feliz que es cuando está en libertad pues aunque le sonría, si su dueña no regresa, lo debo sacrificar.
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