Dolor del Alma

Diciembre de 1999

¿Quién podrá consolarme?
¿Quién podrá quitar mi dolor?
Puesto que mi dolor es dolor del alma,
no del físico que se cura con medicina.

Mi dolor está tan dentro
que a veces no lo siento,
no lo puedo limitar
como Dios limita el mar.

Se desboca sin control
no me puedo reanimar
mientras haya cosas a mí alrededor
que me hagan recordar.

Tendré que acostumbrarme
a vivir con el adentro;
mientras que no exista alguien que pueda consolarme,
lo llevaré conmigo hasta que haya muerto.

¡Bendita sea mi suerte
por qué tuve que conocerte
si no puedo poseerte!

¡Por qué te metiste adentro
alimentando un sentimiento
y a la vez un sufrimiento!

¡Por qué entraste a mi vida,
sino encuentro la salida
para que haya una partida!

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