Caminar II

Ir hacia ninguna parte y no saber cuándo llegar. Sentir que a veces las ganas te dicen que debes parar, pero una angustia más fuerte que debes seguir y cuando todas esas fuerzas y todos los anhelos se fusionan, cuando llega la locura y el extasis se expande dentro de tu cuerpo es cuando ya no esperamos que llegue sino como bestias en celo buscamos aquello que nos liberará y si no lo encontramos entonces será una noche de toste y mañana será un día en que no quieres recordar.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Sueño

Deudas

Sin Pactos