Cadáver Exquisito II

Era irreversible lo que acababa de suceder... el tiempo no había borrado aún las huellas, la cama aún continúa vacía y no hay flores secas que pisar.
El objeto de mi afecto, el que me liberaba en aquellos en que mi locura traspasaba los límites, el polo a tierra cuando el éxtasis me impactaba con su poderosa carga y parecía que todo a mi alrededor giraba lento. Ella, mi fuerza de Sheccid, mi violeta bañada de luna ya no estaba a mi lado. Dónde está? No sé, recorreré toda la ciudad si es necesario me transformaré en viento, seré el rayo de sol que penetra en la mañana hasta encontrarla, hasta tenerla y volver a sentir sus besos cada mañana, sus manos tocando mi cara porque sinceramente en su ausencia soy un papel en manos de un piromano y los espectros que ya su amor había exorcizado revivieron en mi alma y han debilitado a este corazón valiente.
La perdí y no fue por falta de amor en ella o en mi y mucho menos porque el destino lo quiso así sino porque ahora el reflejo de su cuerpo inmortalizado en un recuerdo me ha enseñado que perder es cuestión de método.
Se escucharán los sonidos de nuestros pasos por cada escalera y rincón de esta casa y en mis sueños jugaremos a contar los besos que somos capaces de darnos en una hora, veremos crimen y castigo en los suburbios diez veces al día, despertaré y con cada segundo de este insomnio aterrador sentiré como la inercia del presente me conduce lento pero seguro a un futuro misterioso que me dice, con un fondo musical de origen celestial y una voz tierna y consoladora, que la vida es bella.
Sólo tengo una cosa de la cual me arrepiento en todo el tiempo que estuvo conmigo... nunca le dije: ¡Gracias por el fuego!

Comentarios

KALNEM dijo…
Esto fue un ejercicio en un curso de poesía por allá en 2005. Éramos 2 personas, Adriana (no recuerdo su apellido) y yo, cada una debía mencionar nombres de películas y libros que le gustaran y con ellas armar un texto. Y esto fue lo que salió.

Entradas más populares de este blog

Sueño

Hacia ti

Mujer Pájaro